El contrato de fideicomiso es un documento que entra en juego en algunas herencias, con el objetivo de que el reparto de los bienes y derechos dejados por el difunto resulte a sus sucesores lo más sencillo posible.
Qué es un contrato de fideicomiso y sus características
En el caso del fideicomiso, el significado se limita al ámbito de la sucesión, a diferencia de lo que ocurre en otros ordenamientos jurídicos. Es decir, que en España esta figura solo puede usarse con respecto al reparto de la herencia.
A través de él se entrega la propiedad de unos bienes a una institución o persona que actuará como fiduciaria. Esta será la encargada de disponer de ellos y administrarlos con fines lícitos en beneficio de otra persona, el fideicomisario, que recibirá más tarde esos mismos bienes.
Características
En él intervienen varias figuras; para entender quién es el fideicomiso o fideicomisario hay que analizar el papel de todos los implicados.
- Fideicomitente. Es el testador.
- Fiduciario. El heredero fiduciario es el que recibe el patrimonio y debe conservarlo.
- Fideicomisario. Es el heredero final, a quien el fiduciario debe hacer entrega de los bienes que el fideicomitente dispuso en su testamento que fueran para él.
Cuando el heredero fiduciario acepta la herencia, asume el compromiso de conservar el patrimonio y entregarlo posteriormente al heredero fideicomisario. Cuando se cumplan las condiciones establecidas en su testamento por el fideicomitente.
Tipos de fideicomiso
Condicional
El testamento dispone una serie de condiciones qué, en caso de producirse, provocarán que el fiduciario tenga que entregar los bienes al fideicomisario. Por ejemplo, cuando este último cumpla 25 años.
A plazo
Aquí la única condición para que se produzca la entrega del patrimonio del fiduciario al fideicomisario es el paso de un determinado lapso de tiempo. Por ejemplo, 10 años desde el momento del fallecimiento del testador.
De residuo
En este caso, el fideicomisario o segundo heredero podría recibir o no bienes de la herencia. Dependiendo de si el fiduciario ha consumido o no todo el patrimonio.
En cualquier caso, el contrato de fideicomiso debe determinar si el fiduciario debe limitarse a conservar los bienes para entregarlos después o si también tiene funciones de administración patrimonial. De igual manera, debe señalar si el fiduciario tiene derecho a disfrutar del patrimonio haciendo uso de él o si debe limitarse a conservarlo o administrarlo.
Cuáles son sus ventajas
- Los bienes afectados son inembargables mientras estén en el patrimonio del fiduciario, porque no es él el destinatario final de los mismos.
- Permite al testador tener un mayor control sobre el destino de sus bienes.
- Se puede instituir como sucesores a personas que, inicialmente, no podrían serlo. Porque el fideicomisario no tiene que ser necesariamente nadie que esté llamado en derecho a la herencia.
- Ayuda a flexibilizar el régimen sucesorio.
El contrato de fideicomiso puede ser de mucha utilidad a la hora de repartir la herencia de una manera algo diferente a cómo establece el régimen de sucesiones establecido en el Código Civil. Dejar resueltas este tipo de cuestiones ayuda mucho a la familia a la hora de solucionar los asuntos de la herencia, evitando disputas y malentendidos. En todo caso, antes de arreglar la herencia hay que pasar por el duelo, y una buena forma de hacerlo es dándole a los seres queridos la despedida que merecen. Si necesitas flores para ese momento tan duro, estamos aquí para ayudarte.
